Es la historia de un príncipe que huye de su castillo después de asesinar a su padre (un héroe, literalmente, parricida), es acogido por un archimago que le ayudará a restablecer el equilibrio natural del universo (de Terramar, por lo menos). Es una historia que parece podría haber sido más profunda, pero se quedaron con los aspectos más básicos, el viaje del héroes con un mentor, aliados, un objeto mágico y un enemigo a vencer para ordenar el mundo.
La historia es simple y todo lo demás también, hasta el diseño de personajes y los detalles en los decorados son tristemente básicos. Puede ser interesante, no me molestaría recomendarla para que los niños no se aburran, pero no siento que sea una película de Ghibli. Tiene algunos problemas con hoyos en la trama, cosas no se explican por completo y elementos atractivos no son explotados (como las drogas en el mundo de fantasía, se le podría exprimir muchísimo).
Quizás el problema es precisamente ser parte del catálogo Ghibli, de haber sido de cualquier otra compañía, o si el director no fuera quién es probablemente se le pudiera valorar mejor. Hay que reconocer que es entretenida y hemos visto cosas mucho peores.
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