"Loca por el trabajo" (Luis Eduardo Reyes, 2018)

Alicia (Bárbara del Regil) es una mujer de negocios dedicada al ¿marketing? de una empresa de juguetes no sexuales es despedida por un mal entendido por lo que se enfrentará a un nuevo reto manejar el ¿marketing? de una tienda de juguetes sexuales, mientras intenta recuperar a su familia que ha desatendido debido a su adicción al trabajo.

La vi porque no quería pensar... a veces no estoy de humor y solo quiero tener algo en la televisión como ruido blanco. Últimamente me pasa eso. No quiero ver nada que requiera de mucha de mi atención. Creo que es algo de depresión. Y sale Bárbara de Regil, muchas veces elijo las cosas de consumo porque sale alguien que me gusta. Es una pésima manera de elegir cosas para ver. Pero que mala es la película. El guion, la música, los escenarios, las actuaciones, la música. Pero uso cosas que me molestaron de verdad como el humor simplón.

Es como para gente que revienta en risa nerviosa cada vez que escucha la palabra SEXO. Los guionistas consideraron comiquísimo cosas como: Dildos de diferentes tamaños y formas, calzones (sic) que vibran al ritmo de la música que suena en las cercanías o un conejo de peluche que esconde un pequeño vibrador... un conejo de peluche que en su interior guarda un vibrador. No es un conejo que vibre o un conejo que lleve un strap-on. No sé si censuraron cosas o les pareció muy atrevido o son unos completos idiotas pero se puede hacer humor entorno a la sexualidad sin caer en la vulgaridad, y ser abiertos e incluyentes, pero el humor es increíblemente simple.

Me hiso enojar. Todos los personajes también son muy básicos. La sirvienta poco o nada inteligente, el clerk homosexual ridículo, el gordo que es gordo pero tienen buen corazón, el marido que es un marido pero no se sabe nada más de él, ni siquiera se sabe en que trabaja. Mejor hubiera visto hora y media de videos de Bárbara de Regil haciendo ejercicio.

Datos inútiles: La película costó 27 millones de pesos y recaudó $2,105,743 dólares. Es un remake de una película brasileña llamada “De pernas pro ar”, que supongo que un éxito porque se convirtió en una trilogía.

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